5 de abril de 2013

Érase una desdicha atrás


Érase una vez, una chica infeliz,
Que vivía sola, sola consigo misma,
Y no vivía con nadie,
Por eso era infeliz.

Érase una vez, un chico enamorado,
Que era todo un desdichado,
Y sobre todo era ignorado;
Por eso estaba enamorado.

Érase una vez, una historia,
Sin un final redactado,
Pero donde alguien sufría al fin y al cabo,
Por eso… por eso era una historia.

Érase una vez, un poema frágil,
Que dolía en cada letra,
Porque me contaba la cruel realidad,
Por eso era un poema frágil.

2 comentarios:

  1. Una historia triste, pero como tú dices, sin final redactado... El sufrimiento podría quedar atrás. ¡Gracias por escribir!

    ResponderEliminar
  2. Siempre es bueno saber que a pesar de que las cosas se vean mal, no hay un punto final fijo, y podemos revertir lo escrito y transformarlo en algo bueno, dichoso. Muchas Gracias por el comentario :)

    ResponderEliminar